Una novela de Barrio por Ana Arroyo
Hace unos días nos levantábamos con la noticia de que este año tras doce ediciones, no se fallará el Premio Internacional RBA de Novela negra. No vamos a entrar en las razones porque no es lo que nos toca.
Este galardón como sabéis ha sido otorgado a lo largo de estos años a autores tan conocidos para nosotros como el recientemente fallecido Andrea Camilleri, Philip Kerr, Michael Connelly, Lee Child, Don Winslow, Arnaldur Indridason o Walter Mosley.
Pero yo voy a ir al principio de todo ¿sabéis quién fue el primer ganador de este premio en 2007? Pues el premio se quedó en España para un escritor español: Francisco Gónzalez Ledesma por su obra “Novela de barrio”.
Ledesma, nacido en Barcelona, (algunos lo conoceréis bajo el pseudónimo de Silver Kane por las novelas del Oeste que se vendían en los quioscos) publicó libros de diferentes géneros pero aquí nos vamos a centrar en lo nuestro, porque Ledesma está considerado uno de los más grandes escritores de novela negra de nuestro país y de los más veteranos. Su primera novela de la serie Méndez, “Expediente Barcelona”, fue publicada en 1983. Como curiosidad os diré que fue traducida y publicada por la prestigiosa editorial francesa Gallimard, lo cual le proporcionó un prestigio y éxito editorial en Francia muy superior del que tenía en España, hasta el punto de que sus nuevas novelas aparecían publicadas antes allí que aquí.
Y con esta obra iniciaba así una serie de novelas policíacas con el comisario Ricardo Méndez como protagonista. Sus novelas han recibido varios premios a lo largo de su larga carrera, el primero de ellos llegó con Crónica sentimental en rojo, que recibió el Premio Planeta de Novela. Luego llegarían el Premio Mystère, el Premio Hammett, y como ya os he dicho el Premio del que nos ocupa este artículo.
Y ahora hablemos ya de la novela en cuestión merecedora del primer Premio Internacional RBA. Es una novela de asesinos, de matones, de verdugos; unos por venganza, otros por miedo, otros por amor, donde el comisario Méndez sigue siendo el que no tiene edad, el paseante del barrio y el partidario de la justicia directa. Es una novela con una gran y cruda denuncia social donde el criminal a veces no está en los bajos fondos, sino que lleva uniforme o corbata, y todo en una Barcelona de barrio, de calles estrechas, de sombras y de parques.
He de decir que a veces vamos dejando títulos en la lista de pendientes, priorizando en el tiempo las recién llegadas, (confieso: a mí me ha pasado), pero hay libros en los que es obligación no posponer su lectura. Y “Una novela de barrio” es un ejemplo de lo que no podemos demorar, es justo lo que se espera, página a página, es de las novelas que sabes que te va a gustar, y no te equivocas.
© Artículo: Ana Arroyo, 2019.
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