Entrevista a Trinidad Fuentes por Bibiana Ripol
ENTREVISTA A TRINIDAD FUENTES
AUTORA DE
CUANDO LA NIEBLA DUERME
Trinidad Fuentes (Barcelona, 1967). Criminóloga, investigadora privada y grafóloga, tiene un máster en Psicología Transpersonal y un Postgrado de Coaching y Liderazgo y otro en Mindfulness y Gestión Emocional.
Conocida como la escritora justiciera, tiene en su haber seis premios literarios entre novelas, relatos y obras de teatro. Compagina la dirección de su empresa con su gran pasión: escribir.
«Para mí, hacer justicia a través de la literatura, es un desahogo, una manera de resarcir la impotencia que me producen ciertos temas»
¿Qué diferencia a Minerva, la protagonista de la novela, de otras detectives en el género?
Cuando creé el personaje de Minerva visualicé a una mujer independiente, de gran fortaleza psicológica, autosuficiente, empática, muy intuitiva y segura de sí misma. La principal diferencia con otras detectives diría que es el hecho de que siente pasión por su trabajo, su estatus económico le permitiría vivir de rentas y, sin embargo, ella opta por hacer lo que le gusta: investigar casos complejos.
Eres conocida como “la escritora justiciera”. ¿Buscas siempre una justicia poética en tus finales?
En todas mis novelas está presente la justicia poética, aunque no necesariamente en el último capítulo. Creo que esa justicia que considero fundamental se transmite a lo largo de toda la historia, no solo al final. Para mí, hacer justicia a través de la literatura, es un desahogo, una manera de resarcir la impotencia que me producen ciertos temas.
¿Qué papel juegan las localizaciones como Venecia y el Delta del Ebro en el desarrollo de la historia?
Ambas localizaciones son necesarias en la trama. Al escribir esta novela enlazo dos historias, una ubicada en Venecia, ciudad en la que desaparece-aparece Fátima, por un motivo de peso que se irá viendo a lo largo de la lectura. Y la otra en una zona del Delta del Ebro, concretamente en Els Ullals de Baltasar, lugar donde es hallado el cadáver de Lourdes.
«Creo que para mantener el interés del lector no es imprescindible cruzar géneros, pero sí conseguir que no decaiga la tensión, sobre todo en un thriller»
La relación entre las hermanas Fátima y Lourdes es esencial en la trama. ¿De qué manera e influye en el conflicto y en el misterio central de la novela?
Tanto la relación entre las hermanas como la que mantienen con sus padres es fundamental en esta historia. Si bien, son ellas las protagonistas principales y las que forjan la intriga inicial que se extenderá durante toda la trama. Ambas hermanas guardan parecido físico, pero tienen personalidades muy diferentes y sus propios secretos.
El misterio, el crimen y lo paranormal en una sola historia. ¿Crees que es importante cruzar géneros para mantener el interés del lector?
El principal desafío fue que todo guardase coherencia incluso con el hecho de que sea un espíritu el que tiene un grado alto de protagonismo. La duda era si iba a gustar a los lectores y el resultado de la mezcla ha sido satisfactorio, el misterio mayor y el suspense constante. El personaje preferido por los lectores, según sus comentarios, es Lourdes, la hermana asesinada cuya alma se resiste a abandonar esta vida hasta hacer justicia. Creo que para mantener el interés del lector no es imprescindible cruzar géneros, pero sí conseguir que no decaiga la tensión, sobre todo en un thriller.
En tu novela anterior, La revelación, denuncias el machismo a través de la ficción. ¿Volveremos a ver en esta novela reflexiones acerca de las carencias existentes en nuestra sociedad?
En esta novela las desgracias ocasionadas por actos machistas cobran un papel importante, así como todo lo que de ello deriva y diferentes tipos de violencia machista. Aunque también trato otros temas como las enfermedades mentales y la maldad pura y dura.
«¿Estamos absolutamente seguros de que todo se acaba con la muerte?»
Finalmente, ¿hay algún mensaje particular que te gustaría transmitir con esta historia?
Al escribir esta novela he intentado transmitir varios mensajes que espero que los lectores vayan descifrando. Aquí voy a nombrar tres:
– Las personas que sufren un trastorno mental están enfermas. No hay que criminalizarlas.
– La maldad existe. Y es importante distinguir entre psicópata y psicótico.
– Lanzo una pregunta: ¿estamos absolutamente seguros de que todo se acaba con la muerte?
©Entrevista: Bibiana Ripol, 2025.
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