Entrevista a Inés Plana por Violeta Evori
Me encuentro hoy en Graus (Huesca) para asistir a la presentación de la tercera novela de Inés Plana: Lo que no cuentan los muertos.
La autora, ya alcanzó un gran éxito con los dos títulos anteriores: Morir no es lo que más duele, publicada en 2018, y que fue finalista a mejor novela en Valencia y Morella negras y, además, nominada a mejor novela negra novel en la Semana Negra de Gijón y, Antes mueren los que no aman, en este caso publicada en 2019 y que resultó finalista a mejor novela en Cartagena negra 2020. Inés Plana ha sido miembro del jurado en las ediciones 2020 y 2021 del Premio Internacional de Novela Ciudad de Barbastro.
Inés Plana, nació en Barbastro (Huesca) en el año 1957. Aunque se licenció en Ciencias de la Información por la Universidad Autónoma de Barcelona, siempre ha trabajado en Madrid.
En Lo que no cuentan los muertos, tercera entrega de la saga y que acaba de ser publicada por Espasa, igual que las anteriores, Inés Plana nos vuelve a presentar a Julián Tresser, ascendido ya a Capitán de la Guardia Civil. Está claro que la autora ha conseguido hacerse un hueco en la novela negra española y que además del éxito logrado en sus primeras novelas, ha hecho que sus lectores quedemos atrapados desde el principio, por el carismático personaje, contándonos un nuevo caso donde el protagonista va adquiriendo fuerza.
Me había convencido de que hacerle una entrevista a Inés Plana resultaría una ardua tarea, debido a su profesión de periodista y que ya cuenta con un bagaje importante en su carrera. Por lo que junto al éxito de sus dos primeras novelas, de las que forma parte esta que hoy presenta para completar la trilogía, me daba cierto reparo atreverme a ello. Nada más lejos de la realidad. Ya desde el primer momento, me pareció una mujer sencilla y nada subida en el carro desde el que miran algunos escritores de éxito.
Mi primera referencia sobre Inés Plana fue a través de un conocido en un pequeño pueblo de Huesca. El me habló sobre “una señora que escribe novela negra y que lo hace muy bien”. Me propuse leerla y descubrí que tenía publicados los dos primeros libros de una trilogía. Conseguí el primero y me gustó. Ahora estoy con el segundo y tengo la misma opinión.
Contacté con ella a través de las redes sociales y me respondió enseguida. Pocos días después anunció la presentación en la ciudad de Graus (Huesca) de la tercera parte y aquí es donde estoy hoy, para conocerla personalmente, hacerme con la novela y esperar que me conceda una entrevista, a lo que ha accedido amablemente.
He podido comprobar que Inés es una persona cercana, que disfruta explicando lo unida que se siente a Tresser, hasta el punto de que éste ha llegado a formar parte de «su familia». Debido a las largas horas que pasan en mutua compañía. La prosa de Inés es ágil, para nada aburrida, ni machacona y, sobre todo, hay algo que a mí me gusta especialmente, no se regodea en las escenas criminales más escabrosas.
Sinopsis de LO QUE NO CUENTAN LOS MUERTOS
Rita Marí, la heredera de una gran fortuna, sobrevivió a un accidente aéreo en el que murieron tres amigas suyas. Desde entonces, alejada de su marido e hijos, hundida en la culpa, vive recluida en su mansión al borde del mar, en Valencia. Un año después de la catástrofe, Rita desaparece sin dejar rastro y Julián Tresser, antes teniente y ahora capitán de la Guardia Civil de la UCO, protagonista de las dos novelas anteriores de Inés Plana, se traslada desde Madrid con su equipo para investigar el caso.
Ante él se alza un muro de incógnitas. ¿Quién era en realidad la esquiva Rita Marí? ¿Su desaparición ha sido voluntaria? ¿Quiénes eran los enemigos de esa mujer solitaria y depresiva? Pero, sobre todo, ¿será capaz Julián, también un superviviente de su propio pasado, de descifrar las claves ocultas de la desaparición y afrontar los retos de su presente?
Solo Novela Negra: Inés, como sabes represento a la revista digital (Número 1 en su género) Solo Novela Negra y me gustaría conocer algo más de lo que se encuentra en la prensa, cada una de las veces que presentas tus novelas. También he leído que tu primera novela la empezaste a escribir a raíz de una vivencia personal ¿puedes explicarla para conocimiento de los lectores de nuestra revista?
Inés Plana: Viajando en tren por el litoral catalán, en una de las paradas vi a un hombre ahorcado de un árbol en un paseo marítimo, a no más de cien metros del tren. Fue impactante, nunca se está preparado para afrontar la visión de una muerte real y, en este caso, violenta. Los agentes de la Policía corrían hacia él, pero el tren siguió su marcha y ya no supe nada más. Fue una experiencia realmente traumática que tardé en alejar de mi mente. Cuando empecé a tramar la historia de “Morir no es lo que más duele”, aquel hombre ahorcado regresó a mí y decidí entonces comenzar la novela de ese modo, quizá para calmar la angustia que me producía. Escribir es muchas cosas, pero también una suerte de terapia para lidiar con los demonios del subconsciente.
SNN: ¿Fue entonces cuando se despertó en ti la pasión por escribir novela negra?
IP: No, esa pasión yo la vivía desde muy pequeña, no me recuerdo a mí misma de otro modo que queriendo escribir poemas, cuentos, relatos. Se quedaron olvidados en cajones, pero fueron mi aprendizaje durante la adolescencia. Después estudié Ciencias de la Información y me hice periodista para mantenerme siempre cerca de las palabras y también por pura vocación.
SNN: ¿Escribes con un planteamiento ya hecho? Me refiero a personajes, hechos concretos o van surgiendo a medida que te adentras en la trama?
IP: Comienzo a escribir con una trama básica en mi cabeza, de la que sé el principio y sé el final. La novela me va dictando el camino, soy escritora de brújula, utilizo la intuición y el instinto para avanzar y hasta hoy nunca he hecho esquemas previos. Una vez finalizado el borrador, entonces llega la fase de edición, en la que invierto muchos meses y en la que voy dando la forma definitiva a la novela.
SNN: Tres novelas de éxito necesitan su tiempo ¿Cuánto has tardado en escribirlas?
IP: En “Morir no es lo que más duele” invertí cinco años porque solo podía trabajar en la novela los fines de semana. Fue una historia de resistencia, estaba empeñada en narrar esa historia de que la estaba enamorada y me sentí preparada para abordarla. Fue muy complejo, toda escritura de una novela lo es, pero la experiencia resultó extraordinaria. Normalmente invierto entre año y medio y dos años en escribir una novela. Es el tiempo que tardé en “Antes mueren los que no aman” y en “Lo que no cuentan los muertos”.
SNN: Me llama la atención lo bien descritos que están los escenarios ¿son reales o imaginarios?
IP: Algunos son reales, los más, y otro son ficticios. Invento esas geografías para poder escribir con libertad sobre escenarios donde se van a dar situaciones que no quiero singularizar con un nombre real. Es el caso de la localidad de Uvés en “Morir no es lo que más duele”, cercana a Madrid y donde reside Julián Tresser. O también Cieña, un pueblo de la Costa da Morte donde transcurre una parte de la trama de “Antes mueren los que no aman”. Y ahora, en “Lo que no cuentan los muertos”, he inventado el pequeño pueblo costero de Alassar, al lado de Godella y muy cerca de la ciudad de Valencia.
SNN: Estamos hablando de novela negra y sin embargo tú pasas por esas escenas con cierta elegancia como si quisieras que a tus lectores no se les quedara mal cuerpo. ¿Es así?
IP: La sobreactuación de la violencia no me gusta e incluso la evito cuando la veo en libros o en cine. La crueldad explícita me afecta y tampoco la veo necesaria, cuando siempre es mejor sugerir que mostrar y que sean los lectores quien completen las imágenes en su mente. En mis novelas hay temas dolorosos y crudos, como lo es la prostitución infantil a la que fue sometida Luba, la niña a la que rescata Tresser, pero intento siempre plasmarlos con cierta elegancia y delicadeza para no perturbar más de lo necesario a los lectores.
SNN: ¿Continuarás ofreciéndonos más investigaciones de Tresser o piensas cambiar de registro? ¿Te gustaría escribir otro tipo de historias?
IP: Tresser y yo hemos evolucionado juntos, él como personaje protagonista y yo como escritora, así que espero seguir con él porque pienso que aún tiene mucho recorrido y muchos casos que investigar y resolver, pero a la vez también me gustaría explorarme como escritora y adentrarme en otros registros y afrontar otros desafíos literarios. Acabo de publicar “Lo que no cuentan los muertos” y disfrutando con la promoción, no estoy centrada ahora mismo en la que será mi cuarta novela, pero eso no tardará en llegar porque la pasión por escribir e inventar historias forma parte de mí y no suelo estar mucho tiempo sin comenzar a fabular de nuevo.
SNN: ¿Qué autores son tus referentes en la novela negra?
IP: Especialmente Patricia Highsmith, a la que considero mi maestra, al igual que Ruth Rendell, Dashiel Hammet, Arthur Conan Doyle, Edgar Allan Poe y Stephen King. Cada uno en su contexto me ha ayudado a construirme como escritora y a entender e interpretar las esencias del género.
SNN: ¿Tienes algún libro o algún escritor del que no podrías prescindir nunca?
IP: No tengo uno, sino varios, como es el caso de Thomas Mann y sus novelas “La montaña mágica” y “Los Buddenbrook”, o los “Cien años de soledad” de García Márquez. En novela negra, “El grito de la lechuza”, de Patricia Highsmith, lo tengo como referente constante. Lo he leído varias veces, he estudiado sus recursos narrativos y, por alguna razón o por muchas, me parece una novela magistral, absolutamente redonda.
SNN: Refieres que te han ayudado profesionales en la investigación, tanto policiales como médicos, ¿eso es un punto importante quizás para no magnificar o, al contrario, los temas de los que se trata en tus novelas?
IP: Siempre necesito documentarme y asesorarme sobre algunos de los aspectos que voy a tratar. Pienso que mi oficio de periodista me anima y me obliga a ello. Puesto que los investigadores de mis tres novelas son guardias civiles, desde el principio he querido entender cómo es su trabajo y he tenido asesores del Cuerpo muy generosos conmigo. En “Lo que no cuentan los muertos”, la comandante Luisa, criminóloga y experta en perfiles criminales, me ha guiado para componer el personaje de Amanda, que colabora con Tresser y juntos forman un excelente tándem profesional. También me ha ayudado Miguel, comandante de vuelo, para inspirarme en cómo podría ser un accidente aéreo. Aunque soy escritora y mis historias nacen de la fabulación, quiero que siempre haya verosimilitud en las situaciones que planteo y que exista la verdad desde la ficción.
SNN: ¿Como se gestiona el éxito de una primera novela? ¿Y de tres seguidas?
IP: Más que gestionarlo, lo he disfrutado como si fuera el mayor regalo que podía concederme la vida. Publicar una novela es un privilegio y que la historia conecte con tantos lectores es una alegría inmensa que me anima a seguir y a dar siempre lo mejor de mí misma en cada historia.
SNN: Háblame de tus sensaciones al presentarla.
IP: Son muchas a la vez, pero podría resumirlas en una sola: la emoción, y además una emoción diferente a otras. Es especial, intensa e ilusionante. El cariño, el respeto y el reconocimiento hacia mí de los lectores es una experiencia única y mi agradecimiento siempre se quedaría corto.
SNN: ¿Contabas con que se convirtiera en una trilogía desde el principio?
IP: Lo cierto es que cuando finalicé “Morir no es lo que más duele” y lo envié a editoriales todo era una enorme incógnita. Fue la editorial Espasa, que publicó mi novela, la que me sugirió continuar con el personaje de Tresser. Yo lo estaba deseando, así que la sugerencia me pareció estupenda. Más que una trilogía, yo la veo como una serie literaria. Aunque en “Lo que no cuentan los muertos” se cierra una etapa en la vida de mi querido Julián Tresser, tiene todavía muchos casos que resolver y no son menos los retos que debe afrontar, así que no acaba aquí su trayectoria literaria.
SNN: Imagino que tal como estás haciendo, continuarás presentando tu novela por el resto de España ¿tienes previstas ya nuevas fechas?
IP: Ya se están perfilando algunas de ellas para el año 2022 y las compartiré a medida que se vayan cerrando. Pienso que la promoción de “Lo que no cuentan los muertos” seguirá siendo tan intensa e ilusionante como hasta ahora. Dicen mis amigos que se me nota en la cara y en la mirada mi felicidad y puede que sea verdad, porque realmente estoy feliz por el regalo de vida que supone para mí esta novela, como sucedió también con las dos anteriores.
SNN: ¿Estás escribiendo una nueva historia?
IP: Todavía no he empezado a hacerlo, pero no tardaré porque no sé estar ni vivir sin escribir. Ahora “Lo que no cuentan los muertos” ya pertenece a sus lectores y yo lo que debo y quiero hacer es sumergirme en una nueva aventura y seguir disfrutando de la escritura.
SNN: Si es así, sabes que en la revista Solo Novela Negra estamos a tu disposición para dar voz a los personajes de tus interesantes historias, las cuales no dejan indiferentes a tus lectores y esperamos que desde este momento los nuestros también se conviertan tus seguidores.
IP: Muchísimas gracias, Violeta. Ha sido un placer ser entrevistada en Solo Novela Negra, el gran punto de encuentro de los lectores del género. Todo un privilegio para mí, así que toda mi gratitud.
©Entrevista: Violeta Evori, 2022.
Visitas: 231