Entrevista a Javier Velasco Oliaga y Maudy Ventosa por Beckett & Hawk
ENTREVISTA A LOS AUTORES JAVIER VELASCO OLIAGA Y MAUDY VENTOSA
“MARGARITA LANDI, LA RUBIA DEL VELO Y LA PISTOLA”
1.- Si duda Margarita Landi es una de esas periodistas legendarias que se convirtió en la reina de la crónica negra. ¿Cómo surgió la idea de escribir un libro sobre Margarita Landi?
A través de la relación de Javier con Joaquín Abad, último director de El Caso. En su oficina descubrió los ejemplares del semanario que guarda encuadernados por semestres. Al ojearlos, supo que Margarita Landi merecía un libro. Buscó a sus familiares directos -las nietas Rocío y Macarena-, entrevistó a antiguos directores de El Caso como Juan Caño Díaz y el propio Abad; y comenzó la investigación recopilando libros de la periodista, artículos, entrevistas, Hemeroteca Municipal de Madrid, Biblioteca Nacional… y todo lo que pudimos indagar. Fueron tres años los que estuvimos buceando en los archivos, sobre todo en los familiares que nos los cedieron generosamente.
- ¿Cuál fue el mayor reto con el que os enfrentasteis a la hora de investigar su vida?
Hay épocas de la vida de Margarita de las que no han quedado apenas registros gráficos, como su estancia en Panamá desde noviembre de 1958 hasta 1962 y de los que la familia no sabe nada. Conocemos cosas que involucran a otras personas, pero que no están contrastados, por lo que no aparecen en el libro. Otras las hemos descubierto investigando de manera rigurosa su trayectoria profesional, de su vida personal no se conocía prácticamente nada. Margarita fue muy celosa de su intimidad. Es la primera vez que alguien ha podido consultar los archivos de la familia, que nos han dado muchas claves para seguir investigando en la dirección correcta.
- La revista El Caso fue otro elemento fundamental en su carrera. ¿Cómo describen ustedes la relación entre Margarita Landi y la revista?
La periodista llegó a El Caso casi por casualidad, y el trabajo la apasionó desde el primer momento, dedicando su vida, desde entonces, a la investigación criminal. Eugenio Suarez intuyó desde el primer momento el talento y el potencial que tenía la joven Margarita para, con sutileza y empatía, llegar al corazón de las personas que sufrían la pérdida de un familiar. La relación entre la escritora y el director no solo se circunscribe al ámbito profesional, fue personal desde el primer momento. Era la estrella indiscutible del semanario, lo que despertó filias y fobias entre los compañeros, no obstante, fue muy querida y respetada por todos.
- Margarita Landi trabajó en un tiempo de censura en España. ¿Cómo creen que logró mantener su estilo y destacar en un medio como El Caso durante esos años?
Con sutileza y adaptándose a los tiempos sin perder su esencia. Su estilo era directo, sencillo, claro, riguroso, agudo y un tanto irónico, a la vez de novelesco. Entre líneas dejaba muchas cosas para los que supieran interpretarlo y, explícitas, sentencias como perlas.
Cuando era imprescindible, cambiaban una palabra por un sinónimo que fuera menos duro e indicara lo mismo. El Caso contaba con dos censores dentro de sus oficinas, uno eclesiástico y otro del régimen, de esta manera, adelantaban el trabajo y controlaban al enemigo, como dijo el director en una ocasión.
- Margarita Landi fue conocida por su habilidad para involucrarse directamente en las investigaciones. ¿Descubrieron alguna anécdota interesante sobre este aspecto?
Los lectores de El Caso, en muchas ocasiones, llamaban antes al semanario que a la policía. Por eso llegaban los primeros al lugar del crimen y hablaban con allegados y vecinos sin cortapisas, como ocurrió con el asesinato de los Marqueses de Urquijo, suceso que no quiso seguir después porque, manifestó, había una mano negra detrás de todo ello.
Ella iniciaba las investigaciones por su cuenta si creía que algo se les pasaba a los responsables del caso. En el libro se pone de manifiesto en varios de los sucesos narrados.
- ¿Qué creen que Margarita Landi aportó al periodismo español y a la crónica negra en particular?
Demostró que la rapidez, el trabajo y el esfuerzo tienen su premio, porque das la noticia el primero. Siempre fue respetuosa con todos los implicados, víctimas y verdugos; no juzgaba, describía lo ocurrido y en ocasiones dejaba su opinión, de manera muy sucinta, al final del artículo. Escribía con un estilo que llegaba a distintos tipos de lectores y contribuyó a la alfabetización de la España profunda, porque en los pueblos más remotos querían leer las crónicas de Landi. Incluso el “Lute” dijo que había aprendido a leer en la cárcel para leer los artículos de ella.
Fue precursora del true crime, tan de moda en estos momentos. Contaba asesinatos reales, sin inventar nada. Hoy día, de cada uno de ellos se podría escribir una novela…
- ¿Creen que el periodismo actual conserva algo del estilo que Margarita popularizó en El Caso? ¿O sienten que su enfoque ha cambiado completamente en el mundo moderno?
El periodismo actual no tiene nada que ver con el enfoque que le daba Margarita Landi; ahora prima la inmediatez, la información que reciben los medios suele ser la misma para todos en las ruedas de prensa. Ella tenía acceso directo con los implicados en los crímenes. Se desplazaba a donde hacía falta, no la importaba ir en trenes nocturnos con asientos de madera, en autobuses, camiones, motocicletas y en burro, si hacía falta. Ahora todo es tan rápido que se parecen mucho las crónicas de los diferentes medios. Ella siempre buscaba la verdad y la originalidad. Ahora no hay tanto acceso a los implicados, en general.
- ¿Qué han aprendido ustedes personalmente sobre la vida y el trabajo periodístico a través de la historia de Margarita?
La pasión por un trabajo tiene un precio: Margarita Landi sacrificó su vida personal y, en muchos casos, a su familia, por la pasión que sentía por su trabajo.
Ponerse en el lugar del otro es la única manera de llegar a descubrir las motivaciones que nos llevan a tomar una decisión que, a veces, nos arruina la vida.
La periodista fue capaz de tomar decisiones que cambiaron su vida. Sin titubear.
No todo vale para vender periódicos. El respeto a los demás es lo primero.
- ¿Qué tipo de respuesta esperan de los lectores al descubrir esta faceta más humana de Margarita Landi? ¿Qué les gustaría que los lectores se lleven de su historia?
Detrás de cada persona hay una historia humana que merece la pena conocer. En este caso, Margarita Landi fue capaz de abrir camino a muchas mujeres que vinieron detrás, porque se atrevió a vivir, luchar y destacar en un mundo de hombres llegando a ser, sin lugar a dudas, la mejor reportera de investigación criminal en nuestro país y durante muchos años fue la única.
Las injusticias se denuncian con el arma que cada uno tenga a su alcance; en este caso, la pluma. Landi fue capaz de relatar sucesos de pederastia que involucraban a la Iglesia; crímenes de homosexuales cuando ni siquiera se podía hablar del término; crímenes políticos, estafas… Valiente y libre, pero adaptándose a los tiempos.
- Para terminar siempre le pedimos a nuestros entrevistados que nos dejen una frase final. ¿Nos podrían dejar una?
Por amor no se mata; por amor se muere.
Sí existe el crimen perfecto.
No siempre el muerto es el bueno.
©Entrevista: Beckett & Hawk, 2024.
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