El Carro al que todos quieren subir por Beckett & Hawk
En esta revista es un lujo poder contar con los artículos y las reseñas de alguien como Vicente González, un escritor con mucho bagaje en la novela negra y con un blog delicioso por donde todo amante del género debería de pasar. INMISERICORDES, así se llama. Allí encontraréis de todo un poco, pero sobre todo mucho conocimiento de causa y la experiencia de un gran lector y amante del género.
Pero siguiendo al gran Vicente y sus maravillosas reseñas y recomendaciones de la novela negra clásica, me hace pensar de dónde venimos y hacia donde vamos. Me hace reflexionar si estamos mejorando o estamos levantando un muro que al final no vamos a poder saltar.
Es cierto, que tenemos más medios, más tecnología, más libros, más escritores, más eventos, pero quizás nos falta calidad, nos falta esa sensación de que estamos creando algo diferente, algo nuevo. Me falta la sensación de que estamos mejorando el género, que la novela negra actual es novedosa, de mayor calidad, de que hay un grupo de escritores que marcarán una época.
Y creo sinceramente que es así, estamos empobreciendo a un género maravilloso. Creo que los escritores de novela negra clásica (esos que todos sabemos) son irrepetibles, únicos y que hicieron con sus novelas y con sus pocos medios, algo totalmente novedoso, algo que todavía sigue fresco y latente. Porque ellos se han convertido en maestros, en flechas que marcan el camino que se ha de seguir.
Los que tenemos novela negra de cabecera sabemos que es así. Me aburre soberanamente el estado actual de la novela negra, me agobia tanta mediocridad alentada en muchos casos por la sobreexposición que sufre el género. Porque estamos cansando al lector, lo estamos matando de empacho. Hay mesas de debate que deberían estar clausuradas, hay escritores que no deberían de pisar un escenario de esta clase por falta de conocimiento para hablar de algunos temas, hay premios que deberían estar desiertos. Falta conocimiento, falta reflexión y creo que falta talento. Mucho Talento. Y en esa bolsa nos metemos todos, empezando por nosotros mismos, meto a todos, escritores, editores, festivaleros, periodistas…
En fin… el bueno de Vicente González, que sabe mucho, me hace pensar, y no sé si debo perdonárselo o no. Pero de momento seguiré leyendo sus textos y seguiré pensando que la novela negra es un carro al cual todos se suben, pero nadie tira de él.
©Artículo: Beckett & Hawk, 2023.
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