MALART de Aro Sáinz de la Maza por Antonio Parra
Título
Malart
Datos publicación
Destino. Barcelona 2023. 404 págs.
Datos del autor
ARO SÁINZ DE LA MAZA nació en Barcelona, ciudad donde continúa poniendo nombre a todos sus precipicios mientras trama la quinta entrega protagonizada por el inspector Milo Malart. Inició la serie con la novela El Verdugo de Gaudí (anteriormente titulada El asesino de La Pedrera, 2012), a la que en 2016 seguiría El ángulo muerto y, en 2020, Dócil, que obtuvo los premios Negra y Mortal 2020, el Valencia Negra 2020 y el Tormo Negro 2021, los tres concedidos por votación popular. Malart es la esperada cuarta entrega de la serie.
Sinopsis de la obra
De madrugada, en alta mar a bordo de un yate en la costa barcelonesa, se ha cometido un doble crimen atroz. El inspector Milo Malart conocía bien a las víctimas, un matrimonio de la alta burguesía absuelto en el juicio por el asesinato de una joven gracias a la oportuna contaminación de las pruebas. Torturado hasta la obsesión, todos en el Cuerpo sabían que el inspector estaba dispuesto a pararles los pies como fuera. Que Malart no olvida. Ni suelta la presa. Y ahora ha desaparecido sin dejar rastro. Mientras los indicios hallados en la escena del crimen se acumulan en su contra, para algunos resulta muy fácil unir los puntos. Para otros, en cambio, los hechos no acaban de encajar; sin embargo, no pueden responder a una sencilla pregunta: si es inocente, ¿por qué no da señales de vida?
Su compañera, la subinspectora Rebeca Mercader, no le cree capaz de haber traspasado la línea. Trabajando contrarreloj, está resuelta a esclarecer lo ocurrido aun en contra de las órdenes y a pesar de que puede arruinar su carrera.
Reseña
CERCA DEL FIN
Leyendo esta novela a veces se cernían sobre sus páginas las sombras de un final, y en apariencia tenía tintes de epílogo, pero ahora no es momento de pensar en lo que vendrá o no, sino en esta entrega, en la que los fantasmas del inspector se han hecho más corpóreos que nunca, pero en la que también el ritmo se ha visto acelerado, y el papel de Rebeca Mercader mucho más potenciado que en las entregas anteriores.
Dos viejos enemigos de Milo Malart aparecen asesinados en su barco, y lo peor de todo es que Milo no da señales de vida, con lo que tanto el equipo como los lectores van gestando una tremenda sospecha que las pruebas parecen confirmar, y que los hechos, aún sin dilucidar del todo, tampoco terminan de contradecir. Cualquier seguidor de la serie se asustaría al ver que la presencia de Malart en el primer tercio de la novela es insignificante, casi residual, pero Aro Sáinz de la Maza así lo quiere para que la sombra de esa sospecha siga creciendo.
Así las cosas, Rebeca toma las riendas, ella y algunos compañeros fieles que se pelearán con todas las apariencias. Y es entonces cuando todo se va acelerando, cuando las sombras que habitualmente se cernían sobre Malart son ahora de carne y hueso, y sobre todo es ahora cuando vemos cómo de profunda es la huella que el inspector ha dejado en el modus operandi de sus compañeros, que de mirarle siempre con envidia han pasado a constatar que son capaces de emplear métodos muy parecidos a los suyos.
Hay mucho que demostrar y poco tiempo para hacerlo, hay un Milo Malart encerrado que se juega la vida para salvar a otra joven, asumiendo que el final de su camino puede estar muy cerca. Hay también una lucha de clases, muy bien planteada por Sáinz de la Maza, en la que los policías llevan siempre la peor parte. Y está Goran Juric, el mafioso balcánico cuya personalidad ya se hizo atractiva en la anterior entrega.
La verdad tratará de abrirse camino, los amigos de Malart lo serán más que nunca, las herencias psiquiátricas se difuminan y todo va convergiendo en una trama que ya se apuntó dos novelas atrás, y que ahora por fuerza ha de cerrarse.
En cuanto al mañana, al después de Milo Malart, únicamente es Aro Sáinz de la Maza quien podrá sacarnos de la inquietud.
©Reseña: Antonio Parra Sanz, 2023.
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