NARCOPISO de Paco Gómez Escribano por Antonio Parra
Título
Narcopiso
Datos publicación
Alrevés. Barcelona 2023. 232 págs.
Datos del autor
PACO GÓMEZ ESCRIBANO es autor de diez novelas: El círculo alquímico, Al otro lado; Yonqui; Lumpen; Manguis (premio Novelpol); #MadridPrisión; Cuando gritan los muertos (premios Ciudad de Santa Cruz, Negra y Mortal, y finalista del premio Hammett de la Semana Negra de Gijón y del premio Novelpol); Prohibido fijar cárteles; 5 Jotas (finalista del premio Novelpol, finalista del premio Pata Negra de la Universidad de Salamanca y finalista del premio Cartagena Negra); y ahora Narcopiso. Estas novelas comprenden un viaje físico, literario y social por distintas épocas del barrio del propio autor, Canillejas, situado al este de Madrid, que se complementa con los poemarios Versografía maldita y La vereda de la derrota, de los que han dicho que son el reverso de su prosa. Es autor del ensayo aún inédito Curso de novela negra y policíaca.
Sinopsis de la obra
El Pirri pasa la mayoría de su tiempo en el bar del Julito, un ecosistema en el que el mismísimo Bukowski no habría desentonado, haciendo crucigramas y leyendo novelas negras que le proporciona su amigo el Cortecín, con el que mantiene una extraña amistad que se remonta a la infancia, y que terminó de bibliotecario y experto del género.
En el antro también conviven el Perla, que trata de explicarle los misterios de la vida a su compinche el Araña, que quizá entiende bien la vida, pero es incapaz de entender a su amigo; y el Tijeras, que perdió a sus amigos en el último «trabajo». Además, también pasan allí las horas la Carmen, una falsa pitonisa que sobrevive cobrando a los demás por adivinar un futuro del que no tiene ni idea, y los sobrinos del Araña y sus brothers, las nuevas generaciones que las antiguas ya ni entienden.
Un día, los vecinos de un inmueble cercano, hartos de pedir ayuda a la Policía, recurren al Perla para ver si él puede desalojar a los camellos de un narcopiso que han montado en su comunidad. El Perla, que sabe que contará con la ayuda del Araña, pedirá ayuda al Pirri, que intentará tomar una decisión consensuada con el Tijeras. A partir de aquí, la historia tomará un camino desconocido para todos.
Reseña
AMARGURA SOCIAL
Los lectores que conozcan a Paco Gómez Escribano conocerán también de sobra el madrileño barrio de Canillejas, lugar donde transcurren la mayoría de sus novelas y que el autor se ha encargado de mostrarnos con unas pinceladas tan gruesas como acertadas. Lo normal, entonces, es pensar que con cada título nuevo lo que encontraremos será lumpen de barrio y poco más, pero eso sería un grave error, porque en ese microcosmos hay muchas más posibilidades que la mera crónica delincuencial.
Y eso es algo evidente ya desde las primeras páginas de una novela cuyo título podría habernos llevado por un camino mucho más oscuro, más sucio, más repleto de sangre y mierda. En cambio, lo que Gómez Escribano ha hecho ha sido colocarnos frente a una situación de sobra conocida: la venta indiscriminada de droga al menudeo, pero esta vez desde el otro lado del espejo, es decir, desde los ojos de los vecinos que la sufren.
Tampoco vayan a creer los fieles que Paco se ha vuelto blando, que la edad le ha enternecido, porque nada más lejos de la realidad, lo que ocurre es que quienes también han envejecido son los últimos mohicanos del barrio: el Pirri, el Perla, el Tije, el Araña, el Kilo, la Carmen, la Conchi, la Lola, el Julito…, ellos sí van cumpliendo años pero sin perder la lucidez, por ello se vuelven aún más críticos con la situación que se vive en sus calles, con la sensación de legendario abandono que llevan años experimentando, dando lugar a una durísima y amarga crítica social, la que les proporciona el derecho de vivir en una zona que, década tras década, ha sido ignorada, como si fuera la última brizna del polvo de la ciudad de Madrid.
Muchos han caído durante estas décadas, por el caballo, los maderos, los narcos o el propio destino, pero el puñado de galos resistente al invasor sigue teniendo amor propio, y por eso aceptarán el encargo de unos vecinos que sólo aspiran a vivir con cierta paz, sin que su escalera se llene de chutas abandonadas, orines, vómitos y un buen puñado de amenazas.
Así las cosas, la cuadrilla se ve enfrentada a un destino al que no puede volverle la espalda, y a unos tipos que, desde fuera del barrio, han llegado a colonizarlos, a ellos, que han visto pasar salvapatrias de todos los colores. Lo demás ya pueden imaginarlo, huir hacia delante porque la mirada atrás no compensa ni ofrece paraíso alguno. Y el orgullo, claro, y ese ser del barrio, que es lo único que nadie, nunca, va a poder quitarles de encima.
©Reseña: Antonio Parra Sanz, 2023.
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